Tuesday, January 30, 2007

Año '007

Ufff hace mucho tiempo que no escribía, y pensaba que lo haría, pero decía: tengo mucho de que escribir para ponerme al día.


Así que iba a resumir mi mes de diciembre del 06, pero después pensé : A quien le importa? e hice una pausa, y recordé lo que me encanta escribir.


Desde hace mucho mantengo 'mis bitácoras' (esas que por juramento y/o testamento le pediré a mi prima que las queme) son agendas que contienen las cosas más preciadas de mi vida. Y claro, las tengo todas, porque son un tesoro, algunas incluso han sido un regalo de buenos amigos y amores.


Aquí se las presento:


Arriba el más antiguo, el típico diario de vida, que me lo regalo mi abuela, pero el cual nunca me gustó mucho porque las páginas son aromáticas...jeje, después viene mi primera agenda de Pascualina, que esta cubierta con recortes de bandas, tercera esta una agenda de la U del norte, regalo de un pretendiente ^ ^, cuarta otra Pascualina, que es muy importante porque marca la espera de mi hija. Ahí en esa etapa, dejé de escribir, realmente nunca debí, pero las cosas de la vida lo determinaron.


Y comencé una nueva etapa para el año 2000, con la agenda de la U, que me regalo mi amigo Karlos. Están todas llenas de entradas, recortes, recuerdos, fotos. Sigo con dos más, Pascualina y Mickey. Que fueron regalos de mi amigas.


La tercera parte de ellas, están inconclusas, porque la pequeñita del año 2005 es la única que está escrita, contiene detalles del año que estuve en el extranjero, es diminuta, e igual esta llena de mensajes secretos, y números telefónicos que eran parte de mi vida diaria, los que me conectaron con los amigos a la distancia.


La del año 06 está redecorada por causa de las 'extrañas coincidencias' y no contiene nada relevante, más bien sólo tiene mis deberes comerciales, deudas, cuentas y demases.


Para la navidad pasada, mi amiga Susy, me regaló la de Hello Kitty :) y claro es genial, pero aún no soy capaz de escribirle una misera letra!


Las dos últimas son como diarios de vida y también esperan que algún día las llene de tonterías para que lleguen a ser tan importantes como las otras.


Y necesito escribir, contar mi propia historia, esa que quizás nunca comparta con nadie, porque hasta el momento mi prima Carolina, es la única que ha revisado conmigo ciertas partes. Y fue tan agradable reírnos de cosas pasadas, recordar viejas anécdotas. Volver a sentir penas olvidadas.


Creo que el blog y fotolog pasaron a ser mis agendas y diarios virtuales, pero no contienen cosas tan íntimas, esas que solamente pueden contarse a ese pequeño libro, que aguanta de todo.


Así que esta noche, decidí volver a escribir, escribir de lo que escribo...